Archivos mensualesfebrero 2019

¿Por qué visitar al podólogo?

Los pies… esa parte tan olvidada de nuestro cuerpo…¡y tan importante! ¿Por qué aún mucha gente se resiste a ir al podólogo? Hay muchas razones para hacerle una visita y aquí te las detallamos:

El primer motivo es porque acudiendo al podólogo a tiempo es clave para prevenir la aparición de diferentes problemas y tratar pequeñas molestias que más adelante nos puedan ocasionar un problemamás grave que además puede no sólo afectar a los pies sino también a las rodillas, columna o cadera.

Motivo de más tendrás para visitar al podólogo si practicas deporte. Las actividades deportivas pueden ocasionar diversos problemas que debemos controlar para evitar que se acaben convireindo en lesiones más graves. Además el podólogo podrá ayudarte con ejercicios, plantillas personalizadas y determinando tu calzado ideal.

Otra razón por la que visitar a este profesional será para realizarte un estudio de la pisada. Una mala pisada puede generar disimetrías, problemas de espalda, de articulaciones… Con el estudio de la pisada el podólogo podrá diagnosticar o aconsejar para prevenir la aparición de lesiones musculares y osteoarticulares.

Por último, debemos mencionar que no hay una edad ideal para acudir por primera vez al podólogo. Lo ideal sería realizar la primera visita alrededor de los 5 años, de modo que el podólogo pueda detectar cualquier patología a tiempo.

El peso que llevas en la espalda afecta a la salud de tus pies

Mochilas, bolsos… cada día cargamos con un peso en la espalda que supone un problema también para nuestros pies sin tan si quiera ser conscientes de ello.

El peso que soportemos, cuanto mayor sea afectará en mayor medida al estrés que sometamos a nuestros pies. Del mismo modo, la forma en que llevemos y repartamos ese peso también va a influir en el daño provocado pues no es lo mismo llevarlo en la espalda, delante nuestro o sólamente de un lado.

Sobre los pies recae la totalida de nuestro peso, y es por ello que un aumento de la carga aumenta el estrés lo cual puede ocasionar cambios en la pisada como aumento de la tensión en los tendones (favoreciendo patologías como tendinitis, tendinosis o roturas fibrilares) y también aumento de las presiones sobre la planta del pie (provocando durezas, callosidades, etc).

Normalmente no podemos evitar cargar con algo de peso a diario ya sea el bolso en el que llevamos todas nuestras cosas o una mochila para ir a estudiar o a hacer deporte… Pero lo que sí podemos hacer es seguir una serie de consejos para evitar en la medida de lo posible los daños que se puedan ocasionar.

Lo primero es que debemos llevar el mismo peso en ambos lados del cuerpo. Es decir, no es para nada aconsejable llevar la mochila de un solo hombro como se suele ver a muchos estudiantes haciendo. Es muy importante llevar la carga simétrica, es decir, llevar el mismo peso en ambos brazos. Si no lo hacemos así, podemos causar descompensaciones que produzcan cambios en la marcha, provocando que un pie reciba más carga que el otro e incluso podríamos llegar a sufrir desviaciones de columna.

Otro factor importante es llevar el peso pegado al cuerpo. De este modo, el esfuerzo que tengamos que hacer será menor. Por ello debemos usar las cintas de la mochila para ajustarlas a la espalda. Es un punto muy importante tanto para los estudiantes que cargan con su mochila a diario como para los senderistas y montañeros.

Otro consejo sería llevar el peso en la parte delantera. Es la parte prerible en la que deberíamos llevar la carga aunque seguirá afectando a nuestros pies, pero en menor medida.

Esperamos que estos consejos te ayuden en tu día a día para aliviar el efecto negativo del peso que cargamos a diario en nuestra espalda y pies.

 

Alimentos que favorecen a tus pies

La alimentación, ese tema tan de actualidad últimamente. Cada vez más gente es consciente de la importancia de llevar una alimentación sana y variada y es que esto puede favorecer hasta a nuestros pies.

Comer de mala forma puede ocasionar problemas en los pies tales como la mala circulación, mal olor, inflamación o retención de líquidos entre otros problemas.

Hay una lista de alimentos que podemos tener presentes en nuestra lista de la compra si queremos combatir estas afecciones.

Por ejemplo, los alimentos diuréticos como la piña, el pepino, los puerros, la alcachofa o los espárragos nos van a ayudar a combatir la retención de líquidos.

Para luchar contra la inflamación de pies a parte de ser más que recomendable comer fruta, los alimentos ricos en Omega 3 nos van a ayudar mucho. Esto lo encontramos en el pescado azul (atún, salmón, caballa o arenques) pero también en la leche, el aguacate o las nueces.

Para favorecer una buena circulación sanguínea además del consejo más obvio que es realizar actividad física debemos reducir el consumo de sal, embutidos y grasas saturadas. Además debemos beber abundante agua para hidratarnos correctamente.

Por último, para evitar el mal olor de pies debemos “huir” de tomar en abundancia alimentos como la cebolla o el ajo.

En resumen, en este tema no hay secretos. Debemos llevar una alimentación basada en frutas y verduras además de realizar ejercicio regularmente.

 

¿Dormir con o sin calcetines?

Una pregunta que divide a la población y es que cada uno tiene sus costumbres y manías… simplemente cuestión de gustos. ¿Pero qué es mejor? ¿Abandonarnos a la confortabilidad de nuestro colchón con o sin calcetines?

Lo cierto es que llevar calcetines mientras se duerme tienes algunas cosas positivas, pero también negativas. Vamos a verlo.

Para aquellos que utilizan calcetines al dormir hemos de decir que esto va a favorecerles a la hora de conciliar el sueño. En la temporada más fría del año los calcetines aumentan la temperatura corporal actuando como termorreguladores  y por tanto ayudando a dormir.

Tener los pies calentitos gracias a los calcetines hace que los vasos sanguíneos se dilaten lo cual es interpretado por nuestro cerebro como que es hora de irse a dormir.

Si utilizamos calcetines es importante que sean de fibras naturales como hilo o algodón para evitar que suden durante la noche y de ese modo que se mantengan secos y sanos.

Los calcetines pueden prevenir infecciones ya que actúan como barrera protectora entre la piel del pie y las sábanas, evitando contagios e infecciones.

Pero ¡ojo! dormir con calcetines tiene unos puntos negativos bastante importantes también. Hay mucha gente que se aplica crema hidratante en los pies antes de dormir y se pone inmediatamente los calcetines. Esto no es lo correcto, habría que dejar que la crema penetre bien en la piel dejándolos unos minutos al aire y después ponerse los calcetines, cuando la crema ya se ha absorbido totalmente. Si los colocamos inmediatamente tras aplicar la crema, la arrastramos y se acumula en el tejido creando un caldo de cultivo para bacterias y hongos lo cual puede provocarnos infecciones.

También es importante asegurarse de que el elástico del calcetín no nos apriete. La goma de sujeción puede provocar una compresión tanto en los tobillos como en los pies que puede ocasionar una disminución de la circulación sanguínea en la zona. Por lo tanto para dormir evitaremos utilizar esos calcetines que “dejan marca”.

También hemos de mencionar que si sufrimos de problemas de circulación, por varices o inflamación de los tobillos, dormir con calcetines nos va a empeorar el retorno venoso.

Como podemos observar en este tema como en cualquier otro encontramos una parte positiva y otra negativa. Lo que está claro es que tanto los calcetines que usemos para dormir como para el día a día deben estar limpios para evitar la acumulación de bacterias y aparición de hongos.

No podríamos concluir si es mejor dormir con calcetines o sin ellos. Todo va a depender de nuestras costumbres y con lo que nos sentamos más cómodos, pero teniendo en cuenta siempre los puntos anteriores y casos puntuales que puedan darse. Dependiendo de nuestras características será más recomendable una cosa u otra y ahí la opinión de un podólogo puede ayudarnos.