En ocasiones, la psoriasis puede localizarse en la zona de los pies. Los síntomas más frecuentes serían:
Si hablamos de la zona de los pies, ¿qué tipos de psoriasis podemos encontrar?. Pues bien, hay distintos tipos de manifestación de esta patología en función de la gravedad y de la forma de las escamas.
Podemos encontrar psoriasis en la piel, que va a ser más sencilla de tratar que la psoriasis en las uñas puesto que la vía tópica dérmica de absorción es más rápida al igual que la regeneración de la piel. La solución va a ser la aplicación de fórmulas magistrales y cremas recomendadas por un profesional. Y además, sería muy recomendable acudir al podólogo para realizar sesiones de quiropodia, gracias a las cuales se podrá eliminar el exceso de queratina y facilitar la absorción del fármaco tópico.
Otra de las afecciones puede ser la psoriasis en las uñas de los pies. Las cuales se van a volver blandas, quebradizas y arenosas y por tanto más vulnerables a infecciones por hongos. Y además es probable que presenten un aspecto amarillento.
Del mismo modo, para tratar este problema recurriremos a fórmulas magistrales aunque en este caso el tratamiento será más bien paliativo, es decir, no atacará el problema de raíz. Si el trastorno persiste, se podrá recurrir a fármacos orales, siempre bajo la prescripción de un podólogo.
Por último, la psoriasis también puede afectar a las articulaciones de los pies. En este caso será fundamental el uso de fármacos orales administrados por un podólogo. Y complementar el tratamiento con sesiones de fisioterapia.
Como siempre, si padeces de psoriasis o sospechas que puedes tener esta enfermedad, recomendamos consultar con un especialista y seguir todas sus indicaciones.
Si vives en Lugo o alrededores, puedes acudir a la clínica de podología o Camiño donde te ayudarán a resolver los problemas con la psoriaisis en los pies.
¿Pero es este método realmente preciso y válido para averiguar la talla correcta del calzado de los niños? Lo cierto es que es una táctica meramente orientativa. La mayor parte de las veces nada precisa pues hay que tener en cuenta ciertos aspectos:
1. Primero, que la puntera no siempre es blanda.
2. Que el dedo gordo no tiene por qué ser el más largo.
3. Que el tobillo debe de ir bien sujeto al contrafuerte para que al niño no le quede bailando.
Así que, te estarás preguntando, ¿qué método utilizo para acertar con la talla de los zapatos del peque de la casa?. Podemos sugeriros dos técnicas:
1. La primera es extraer la plantilla del zapato (siempre que sea posible) y medirla con el pie del niño encima. De ese modo debería sobrar 1 cm de largo (del dedo más largo al extremo de la plantilla) y el punto más ancho del pie tendría que coincidir con el punto más ancho del zapato.
2. La segunda técnica, nos servirá cuando la plantilla del zapato no sea extraíble y consiste en dibujar el contorno del pie del niño en una cartulina o un papel. Para que el contorno sea realista, debemos dibujar esta plantilla con el niño de pie.
3. Una vez tengamos recortada nuestra plantilla, simplemente deberíamos introducirla en el zapato que estemos mirando en la tienda, de modo que en el zapato del niño debería sobrar entre 1 y 1,2 cm de largo para que el pie disponga del espacio suficiente dentro del calzado cuando esté en movimiento. Es importante tener en cuenta que esta plantilla casera debemos hacerla para los dos pies, pues no siempre son iguales, y probarla de el mismo modo en ambos zapatos en la tienda.
Esperamos que estos consejos os sean de ayuda para escoger lo mejor posible la talla del calzado de los más pequeños.
Hemos hablado en reiteradas ocasiones de que escoger el calzado adecuado ya sea para el día a día o para practicar deporte es algo fundamental para la salud de nuestros pies. Pero, ¿y qué pasa con los calcetines? Muchas veces les restamos importancia pero lo cierto es que es importante también prestar atención a cuáles elegimos, sobre todo a la hora de realizar algún deporte ya que pueden ayudarnos a evitar lesiones y mejorar nuestro rendimiento deportivo.
Podemos encontrar diferentes tipos de calcetines para la práctica deportiva. Los más básicos son los calcetines normales, que suelen ser de algodón y prácticamente no aportan elementos técnicos. Serían los más recomendables para realizar una actividad deportiva ocasional o de una intensidad baja.
Un deporte que está muy de moda en los últimos años y del cual hemos hablado también en anteriores artículos es el running. Es en este deporte en el que encontramos la gama más amplia de calcetines entre los que elegir. Podemos encontrar calcetines técnicos o de uso intenso. Se trata de otro nivel de calcetines, pues cuentan con una forma anatómica que diferencia el pie derecho del izquierdo, tejidos elásticos resistentes para las zonas que requieran mayor estabilidad, no llevan costuras, tienen zonas de acolchado y suelen ofrecer bastante compresión para favorecer el retorno venoso y al mismo tiempo evitar la fatiga muscular.
Si hablamos de senderismo o deportes de montaña, sucede lo mismo, encontraremos calcetines técnicos o de uso intenso. La diferencia es que en este caso, en función del clima podremos elegir entre calcetines que abriguen de las bajas temperaturas y mantengan el calor o bien calcetines más frescos que eviten que el calor se acumule en los pies.
Para el fútbol por el contrario se suelen utilizar medias ajustadas que también cuentan con elementos técnicos para ofrecer mayor estabilidad y evitar lesiones.
Hemos mencionado los deportes más populares pero sin duda hay muchos más como el ciclismo, baloncesto… Y también para ellos podemos escoger los calcetines más apropiados. Sin duda, dejarnos asesorar por un podólogo deportivo será garantía de una correcta elección.