El running y tus pies
En los últimos meses se ha puesto muy de moda salir a correr, lo que se ha generalizado con el término anglosajón «running». Ahora en pleno verano es un momento estupendo para prácticar este deporte o por qué no, animarse a probarlo si nunca se ha tenido el hábito de salir a correr.
Eso sí, cuidado con las altas temperaturas. Durante el verano las mejores horas para salir a correr son temprano por la mañana o caída la tarde, momentos cuando las temperaturas aprietan menos. Así nos libraremos de posibles golpes de calor y otras incomodidades.
Salir a correr está bien porque estaremos practicando deporte pero hay que tener en cuenta que el running provoca un gran impacto en nuestros pies, es uno de los deportes más agresivos para esta zona del cuerpo. Es un ejercicio que implica soportar una gran carga de manera repetiday que va a afectar a varias partes de nuestro cuerpo tales como la cadera, rodillas y tobillos.
Por ello a los adeptos al running les sera de gran importancia realizarse un estudio biomecánico de la pisada para evitar lesiones que puedan derivar de esta práctica deportiva. El podólogo, tras analizar los resultados del estudio podrá proponerte el uso de unas plantillas personalizadas en caso de que fuera necesario.
Sobra decir que es muy importante el tipo de zapatillas que utilices. Escógelas con cuidado y déjate aconsejar para elegir la más adecuada para ti según tu peso, kilómetros y superficie por la que sueles correr. Ligado a esto va el uso de unos buenos calcetines por supuesto.
Además ten en cuenta que si vas a participar en una competición deportiva no debes estrenar las zapatillas ese día.
Esperamos que estos consejos te ayuden a disfrutar del deporte de moda, ¡feliz carrera!